Un “gastro-pub” de Madrid ofrece ser “diputado por un día 2 x 1 en copas”El desprestigio de la clase política española está calando en el pueblo
El desprestigio de la clase política española está calando en el pueblo de forma irreversible, por más que los medios de comunicación “oficiales” se empeñen en camuflarlo. A los pitidos y abucheos a los miembros de la Casa Real, las manifestaciones contra las inauguraciones que hacen los políticos de las obras públicas, la rebeldía de los funcionarios honrados, los gestos de desobediencia de los ciudadanos hartos o las denuncias civiles de corrupción que se hacen desde internet, ahora el turno ha pasado a los bares, cafeterías y “pubs”, quizás los lugares más concurridos en España. Y uno de ellos ha puesto en marcha una curiosa oferta.
El “gastro-pub” madrileño “Sagasta 28″, ubicado en la calle del mismo nombre, sorprende a los viandantes de esta populosa vía madrileña situada junto a la plaza de Alonso Martínez con una curiosa oferta: “sea diputado por un día: 2 x 1 en copas”. Sabedores de que los parlamentarios tienen buen apetito y mejor ingesta, sobre todo cuando no la pagan ellos y lo hacemos en su lugar los contribuyentes con nuestros numerosos y elevados impuestos, los propietarios del local ofrecen la jocosa posibilidad de sentirse como un político durante unas horas y pagar la mitad por consumir el doble. Es una muestra más del hundimiento de la “casta” o partitocracia española, cuya imagen parece ya irrecuperable, en un día en el que se ha sabido además que el Tribunal Supremo ha retirado el carnet de conducir al diputado Vicente Ferrer (PP) por conducir ebrio. El escándalo de la autosubvención de 4,5 millones de euros que se han concedido los diputados para abaratar los precios de sus 10 bares y restaurantes exclusivos de la Cámara Baja parece que ha sido la gota que ha colmado el vaso… de “gin-tonic”, pues durante esta semana se seguían sirviendo bebidas alcohólicas en las dos cámaras con los mismos precios. La fuerte controversia pública no ha rectificado ni un ápice sus conductas.
Y es que la España real cada vez está más separada de la España oficial y mientras la primera sufre los abusos y corrupciones de aquellos que dicen que la representan, la segunda maneja el dinero de todos a manos llenas y no siente ni la crisis económica ni el desempleo, una de las mayores vergüenzas del mundo civilizado debido al millonario número de parados. De ahí que el sentido del humor -a veces la única salida de los desesperados- aflore con tanta gracia en el apacible ciudadano medio.
A veces, sin embargo, la sonrisa se convierte en una mueca de amargura. Cerca del Senado se ha apostado una “mujer de mediana edad” (50 años) que con un libro en las manos reclama un empleo como asistenta de hogar o limpiadora. Licenciada universitaria, trabajaba en una empresa hasta que ésta quebró y ahora se ofrece para el servicio doméstico con su título universitario a cuestas, según explicó a este blog.
Unos metros más abajo se produjo otro de los cientos de “escraches” que a diario se producen en España contra los políticos y cuya existencia no sale en los medios de comunicación. Esta vez eran de nuevo los afectados por el fraude en las hipotecas, que se atrevieron a protestar en las mismas puertas del Senado, fuertemente rodeados por la policía. Muchos de ellos ancianos, algunos agentes manifestaron su comprensión. Es la escena cotidiana de un país que se va hundiendo poco a poco mientras su clase dirigente amansa una enorme fortuna cuya mayor parte ya está fuera de España a la espera de su huida.
